Llegamos al final de este no tan largo camino por la Ría de Pontevedra. ¿quién después de ver esto no querría asomarse y deleitarse por aquí?, si se diera el caso me sentiría culpable de no haber sido capaz de comunicaros con verosimilitud la grandiosidad y belleza de esta naturaleza.
Así que sin más dilación me despido con una de las típicas intromisiones acopladas en las canciones de Manu Chao:
Próxima estación: Esperanza
Final del trayecto, final del trayecto
Próxima estación: Avenida de la Paz
Continuará..
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